Patrimonio

En su conjunto, es una de las construcciones agrícolas más grandes del término municipal de Almansa. En este sentido, es un complejo agropecuario modélico, pues alberga todas las actividades propias del mundo rural de esta región, excepto la de molino.

 

Aparece en el paisaje como una casa solariega, de fachada monumental que le confiere un carácter de palacete. Es el volumen principal, reservado a la residencia de sus antiguos propietarios, un edificio destacado por su composición y ornamentación, principalmente en su fachada. Ésta queda distribuida en tres alturas y marcada por amplios ventanales, coronada por un frontón. El tratamiento exterior del edificio sigue patrones clásicos e italianizantes, propios de un estilo neoclásico que irrumpe en Europa y la América Colonial desde mediados del s. XVIII. El edificio en sí es una joya de la Arquitectura por su singularidad en el entorno, cuyos muros cobran vida con las leyendas de antiguos indianos venidos de las Américas con riquezas.

 

A partir de la casa solariega, se desarrollan otros edificios directamente relacionados con las labores agrícolas y de producción, como la casa de los labradores, la bodega-lagar, una de las más grandes de Almansa, cuadras, corrales, etc.

Toda esta riqueza patrimonial de Santa Rosa viene a completarse con los valores naturales del lugar y el entorno. Valores paisajísticos y medioambientales de unas tierras ricas en flora y fauna autóctonas en connivencia con la plantación y cultivo tradicionales de viñedos.

 

Santa Rosa es un paisaje plagado de Historia, Patrimonio, riqueza natural y uvas.